martes, junio 28, 2005

¿Cómo matar una campaña política?

¡Señoras y señores, niñas y niños, ciudadanos y ciudadanas...! Ya llegó el momento para el Estado de México de decicir cuál será el próximo gobernador. Este fin de semana encontré en uno de los tantos periódicos que hay en circulación, de los que en estos tiempos electorales se encuentran inmersos en encuestas, que el ganador indiscutible es Peña Nieto... Priista.

Y... - esta parte me encanta, es cuando escribo mi clásica pregunta - ¿Saben porqué? No porque sea mejor, sino porque su más cercano competidor, Ruben Mendoza arruinó su campaña. Él solito. Déjame ponerlo sobre la mesa y te diré, según mi análisis de comunicación y marketing político en qué falló y qué hizo bien que no continuó.

1) Lo que hizo bien, al inicio fue apoyar su campaña mostrándose como un candidato que había logrado cosas. Eso indiscutiblemente fue un impulso que le brindó un arranque muy sólido.

Rubén Mendoza tuvo una buena gestión como presidente municipal, su imagen de "alguien" que genera cambios y que hace que las cosas se muevan, le dió una gran credibilidad como hombre trabajador.

2) Lo que hizo mal, fue haber cambiado de estrategia. Pasa que en muchas ocasiones, los candidatos, como las empresas, les cuesta mucho trabajo contruir sobre una misma idea. Sobre un sólo mensaje. Las grandes campañas y los grandes mensajes se contruyen a través de ideas simples y sencillas.

Su peor decisión fue no saber construir sobre el mensaje de "hombre trabajador", les faltó imaginación. Y quisieron hacer un mensaje populachón: "soy feo, pero sé trabajar". ¿A nadie, sólo a Rubén, le interesaba que Peña Nieto estuviera guapo?

El éxito de un producto se basa en el éxito de cubrir la necesidad que promete satisfacer. El centro del mensaje no es "que el contrario sea guapo", sino, el centro es "yo soy más trabajador que el contrario".

Al final de cuentas, los gustos estéticos no van a resolver problemas como inseguridad, el Estado de México, o mejor dicho, la zona conurbana es una de las más inseguras del país, el robo de autos está a la orden del día, y no se digan los secuestros, es una tontería ponerse a discutir sobre "guapalidades", cuando hay problemas mucho más urgentes.

No sé quien haya asesorado a Rubén, lo que si puedo decir es que si quisieron ahorrarse unos cuantos miles de pesos en asesoría, hoy está pagando cara esa mala decisión. Asesores hay muchos, es cuestión de saber buscar a los mejores.

Rubén ¡acuérdate de mi, este domingo!

ACTIVIDAD: Imagínate que eres el candidato Rubén Mendoza, sobre la idea de Hombre Trabajador ¿qué actividad, evento o acto pudieras construir en orden de comunicar tu idea, pero sin decirlo textualmente? ¿Difícil?

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